50 nombres y títulos de Jesucristo
¿Quién es Jesucristo? Su función puede definirse en parte con los cientos de nombres y títulos que se le dan en varios pasajes de la Biblia. Aprende más sobre Jesús y la razón por la que recibe estos cincuenta nombres.
Haz clic en cada nombre o título para ver dónde se hace referencia en la Biblia. A medida que lees cada versículo, reflexiona en el significado de ese papel que Jesús desempeña en tu vida.
Llega a ser la mejor versión de ti mismo por medio de Jesucristo. Los misioneros te pueden ayudar.
El cambio es posible. Comienza tu travesía hoy reuniéndote con los misioneros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Solicita una visita.
¡Gracias! Pronto recibirás un mensaje de confirmación.
Recibirás varios mensajes por correo electrónico y otros servicios de mensajería (por ejemplo, mensaje de texto o WhatsApp) para confirmar tu solicitud y ayudarte a prepararte para tu visita.
Los misioneros de tu zona se pondrán en contacto contigo pronto.
Estamos deseosos de hablar de las enseñanzas de Jesucristo contigo. Podemos reunirnos en persona o en línea.
Error: El formulario no se pudo procesar en este momento. Inténtalo de nuevo o actualiza la página para volver a empezar.
Lo que Jesús como “Salvador” significa para las personas
“A pesar de los errores que había cometido, de los caminos equivocados que había tomado y de la fe que había abandonado, mi Salvador estaba allí con los brazos abiertos, listo y dispuesto a ayudarme a regresar. Él estaba allí para elevarme cuando más lo necesitaba”.
Rich
“Creo que una de las cosas más grandes que me ayudó a superar esa enorme prueba en mi vida fue el hecho de que finalmente me di cuenta de que había alguien que había sentido exactamente cómo me sentía […]. Y gracias a [Jesús], supe que podía tener el valor para confiar. Confiar en Dios, confiar en Cristo para salir adelante en una época en la que sentía que yo no valía nada”.
Lindsey
“Dios me dijo que Jesús es el Cristo, que Él es mi Salvador personal. Eso es muy significativo para mí […]. Le debo todo, no soy nada sin Él. Con Jesucristo, con Dios en mi vida, me siento más completo. Me siento más estable, más equilibrado”.