Jesucristo

“The Raising of Lázarus at the Prayer of His Sister Mary”, [Lázaro es levantado por la oración de su hermana María], por Michelangelo Cerruti, 1663–1749.

Casa de Lázaro, Betania

Después de que Jesucristo recibiera la noticia de que Su amigo Lázaro estaba gravemente enfermo en el pueblo de Betania, a unos pocos kilómetros de Jerusalén, dijo a Sus discípulos: “Nuestro amigo Lázaro duerme, pero voy a despertarle” (Juan 11:11). Los discípulos de Jesús no entendieron que cuando dijo que Lázaro “duerme”, quería decir que Lázaro había muerto. Cuando llegaron a Betania, “hacía ya cuatro días que Lázaro estaba en el sepulcro” (Juan 11:17). Al llegar, encontraron a las hermanas de Lázaro —María y Marta— destrozadas. Ellas habían tenido la esperanza de que Jesús llegara a tiempo para sanar a su hermano. No sabían que Jesús estaba a punto de llevar a cabo uno de Sus mayores milagros hasta el momento, al levantar a su hermano de entre los muertos. Sin embargo, antes de hacerlo, Jesús dedicó tiempo a llorar con ellas y a reconocer su dolor.

La invitación

Alivia la carga de los demás

A veces, todo lo que podemos hacer para ayudar a alguien es hacerle saber que lo amamos y que estamos a su lado. Dedica un tiempo en los próximos dos días para tender una mano a alguien que conozcas que esté luchando con pérdidas, enfermedades u otras dificultades, para que sepa que no está solo.

Preguntas para reflexionar

¿Qué podrías decirle a alguien que lo está pasando mal para hacerle saber que estás ahí para él o ella?

¿Por qué crees que Jesús lloró con María y Marta?

Pasajes de las Escrituras sobre el consuelo

Mapas y representaciones

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