3 maneras de establecer una relación con Dios
Dios es nuestro Padre amoroso, y podemos tener una relación fuerte y significativa con Él.
A medida que conocemos a Dios, hallamos más paz, felicidad y sentido en nuestra vida, incluso en un mundo de caos. A continuación encuentra tres maneras en las que puedes edificar y fortalecer tu relación con Dios.
“Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado” (Juan 17:3).
Estudia la palabra de Dios
Jesús dijo: “Aprended de mí […] y hallaréis descanso para vuestras almas” (Mateo 11:29). Dios es nuestro amoroso Padre y desea relacionarse con Sus hijos. Podemos aprender acerca de Dios al leer sobre Él y la forma en que ha ayudado a Sus hijos a través de la historia. Tanto la Biblia como el Libro de Mormón son la palabra de Dios. Ambos contienen relatos de cómo Dios ha ayudado, bendecido y, en ocasiones, disciplinado a Su pueblo. Considera leer los relatos del Nuevo Testamento sobre los milagros de Jesús y Su perdón. Lee el relato del Libro de Mormón sobre Alma, hijo, y cómo Dios contestó la oración de su padre (véase Mosíah 26–28). La Biblia y el Libro de Mormón han ayudado a millones de personas a encontrar a Dios y a sentir Su amor.
Habla con Dios
Dios ama a Sus hijos y desea saber de ellos. De la misma manera que nos esforzamos por desarrollar una relación con un nuevo amigo hablando con él, podemos establecer una relación con Dios por medio de la oración. Como hijo suyo, puedes pedirle ayuda y guía al orar. Puedes contarle tus desafíos y tus días buenos y malos. Y puedes orar con gratitud para agradecerle todas las cosas que disfrutas en la vida, ya sean grandes o pequeñas.
No importa quién seas, Dios está deseoso de bendecirte y ayudarte a encontrar la felicidad. Jesús prometió: “Y todo lo que pidáis en oración, creyendo, lo recibiréis” (Mateo 21:22). Al principio, orar puede resultar extraño y puede que no estés seguro de cómo reconocer las respuestas de Dios. Pero a medida que practiques continuamente e intentes orar con fe, la oración puede convertirse en una forma segura de comunicarte con Dios. Requerirá esfuerzo, pero vale la pena.
Seguir a Jesucristo
Jesús enseñó: “Yo soy el camino, y la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por mí” (Juan 14:6). Aprender acerca de Jesús y Sus enseñanzas es una parte importante del establecimiento de una relación con Dios. Jesús nos dio el ejemplo perfecto que debemos seguir. Nos enseñó cómo vivir y cómo tratar a los demás. Sufrió y murió por nuestras carencias y dificultades para que pudiéramos hallar la felicidad en esta vida por medio de Él. Él es el mayor don de Dios para nosotros. Podemos leer sobre la vida de Jesucristo y Sus enseñanzas en la Biblia y en el Libro de Mormón. Al tratar de vivir como Jesús enseñó, le demostramos a Dios que deseamos estar más cerca de Él.