El templo

Después de entrar en Jerusalén, uno de los primeros lugares que Jesús visita es el templo. Allí, en el interior de la casa de Su Padre, Jesús ve a varios comerciantes haciendo negocio. El ver un lugar de adoración convertido en un centro de comercio es algo que Jesús no puede soportar. Hablándoles con una autoridad indudable, les manda que se marchen.

A veces nuestra propia vida puede parecer estar tan abarrotada y en conflicto como el templo de Jerusalén. Jesucristo nos ha mostrado que podemos tener el valor de eliminar distracciones innecesarias que se interpongan entre nosotros y nuestra relación con el Padre.

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#Escúchalo al eliminar las distracciones

Aparta un tiempo hoy para desconectarte de tus dispositivos y haz algo que sea bueno para tu alma, ya sea pasar tiempo con tu familia, dedicar un momento a reflexionar sobre la vida o cualquier otra cosa que te ayude a sentirte cerca de Dios.

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Mientras lees el relato bíblico de cuando Jesús purificó el templo, reflexiona sobre las formas en que puedes liberarte de las distracciones o influencias dañinas en tu vida.

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